Hoy en día y debido a la obligatoriedad del uso de las mascarillas para evitar posibles contagios del COVID-19, nos surgen las dudas de ¿Cuál debemos usar? o ¿Cuál es la forma más correcta de colocarla?. Ante todo debemos saber que no todas las mascarillas nos van a dar el mismo grado de protección pero todas evitan el contagio.
El uso de este material es obligatorio en la vía pública, en espacios al aire libre y en cualquier espacio cerrado de uso público, que se encuentre abierto al público, siempre que no sea posible mantener una distancia de seguridad interpersonal de al menos dos metros.
La prevención empieza desde antes de ponernos la mascarilla, por lo que debemos higienizar nuestras manos ya sea con agua y jabón o con el uso de geles hidroalcohólicos,. Una vez higienizadas nuestras manos procederemos a sacar la mascarilla de la bolsa cogiéndola siempre por las gomas, evitando el contacto con el anverso y el reverso de la mascarilla.
Con la mascarilla bien sujeta por las gomas la colocaremos alrededor de las orejas cubriendo así nuestra nariz, boca y barbilla; posteriormente estiraremos desde los extremos superior e inferior para que quede perfectamente ajustada a nuestras necesidades. Si usted usa gafas retírelas y vuelva a ponérselas una vez haya sido colocada. Con la mascarilla bien sujeta y adaptada, nos queda ajustar el clip nasal haciendo una pequeña presión sobre los laterales de nuestra nariz, con la que fijaremos la mascarilla a nuestro gusto.
A la hora de retirarla procederemos de nuevo a la higienización de nuestras manos. Una vez limpias cogeremos la mascarilla por las gomas, tirando de ellas de tal manera que las desenganchemos de las orejas y quede totalmente libre. Tras haberla retirado deberemos doblarla a la mitad por los extremos y evitando tocar la parte externa de tal manera que la parte interna quede hacia adentro. Para finalizar, volveremos a meter la mascarilla en la bolsa y lavarnos nuevamente las manos, como recomienda la OMS.
Que no debemos hacer.
Durante el tiempo que la lleve intente no tocarla en exceso y de hacerlo, intente manipularlo tras desinfectarse las manos. Una vez se haya higienizado procure secarse bien ya que si se moja la mascarilla perderá la efectividad.
El uso de la mascarilla previene de los contagios si está bien colocada recubriendo la cara, por ello no se debe colocar ni encima de la cabeza, ni por debajo de la barbilla o llevarla colgada del brazo o mano.
Una vez hayamos consumido su vida útil deberemos introducirla en una bolsa de plástico, que a su vez deberá introducirse en la bolsa que usemos para los residuos generales o de rechazo. En ningún momento debemos tirarlo al contenedor azul o al amarillo, ya que este producto no se reciclará.